¿Cuáles son los poderes psicológicos del regalo?
Esta fue la pregunta que se hicieron los investigadores de la Universidad de Harvard (Estados Unidos) y de Brunel (Reino Unido), quienes se dieron la tarea de descubrir el secreto tras esta “costumbre” altruista.
Para empezar, hay que decir que los investigadores analizaron los cambios psicológicos de tres grupos de personas en particular: los que estaban en una relación de noviazgo, los jefes de empresas de tecnología y las personas que declararon ser sociables y amigables.
El estudio reveló que los tres grupos aumentaron los niveles de endorfinas, también conocida como “hormona de la felicidad”, a la hora de recibir y destapar un regalo. Los investigadores revelaron que los niveles de endorfinas son equiparables a los del enamoramiento.
Sin embargo, a la hora de evaluar a cada uno y de revelarles de quién venía el regalo los test psicológicos cambiaron:
Personas en una relación
A este grupo se le reveló que el regalo venía de su pareja. En ese instante se detectó pensamientos positivos y de placer en la parte frontal del cerebro (córtex prefrontal).
Por otro lado, la sensación de bienestar aumentó cuando se enteraron que era un regalo hecho por su pareja a diferencia de los que compraron el regalo. Las tarjetas de regalo generaron poca y nula actividad cerebral.
Personas sociables
Estas personas recibieron el presente de un amigo cercano. A este grupo se le detectó una descarga de serotonina, es decir, el neurotransmisor encargado de la felicidad.
Sin importar el tamaño del regalo, esta actividad rompió con la rutina de los participantes y generó mayor actividad neuronal. Luego de recibir el presente, confesaron tener empatía por quien les entregó el regalo y resaltaron los buenos momentos vividos con esa persona.
Jefes de una empresa
Para sorpresa de los investigadores, este grupo en particular tuvo una reacción psicológica diferente. En un principio se les dijo que el regalo provenía de uno de sus empleados. Con esta información el cerebro activó los lóbulos frontales en la que está involucrada la toma de decisiones, la adecuación del comportamiento social y la reacción ante un peligro inminente.
La primera reacción del cerebro fue generar desconfianza, la misma que cuando conoce a un extraño. Luego de destapar el regalo, sin importar el tamaño o precio, se anuló la desconfianza y sintieron alegría por recibir el presente. Todo en cuestión de segundos.
Por último, el regalo ayudó a profundizar las relaciones entre empleado y jefe lo que generó un mejor ambiente laboral.
FUENTE: revistadiners.com.co